El derecho a pasar frío

Artículo Original: Alexey Zotiev

Cada patriota ucraniano sabe, no solo que tiene que odiar a Rusia, sino alejarse lo más posible de cualquier cosa rusa. Si no, ¿qué tipo de patriota puede ser si disfruta de aquello que se produce en el territorio del país agresor? Sin embargo, eso es muy difícil. El problema es que Ucrania, como Estado, está vacío. Ni siquiera puede proveerse de sus funciones vitales básicas. Así que, la Ucrania “independiente, orgullosa y amante de la libertad” de vez en cuando se ve obligada a arrodillarse a los pies de Estados Unidos, la Unión Europea y, lo que es peor, Rusia. Y no a todos les gusta.

El pasado domingo, un bloguero local de Kiev, que, por cierto, es un “verdadero patriota de Ucrania”, publicó un vídeo en el que denuncia al actual gobierno, que está comerciando con el país agresor. El bloguero afirma que en Kiev, concretamente en la estación Darnitsa, hay docenas de vagones rusos con carbón ruso. Los trenes han llegado periódicamente a la capital ucraniana directamente desde Rusia durante años. Además, según el autor del vídeo, Denis Kazansky, el carbón no es todo ruso sino “robado de ORDLO” [RPD/RPL].

“Ayer, Serhiy Brigadir y yo grabamos docenas de vagones rusos con carbón en Darnitsa. Trenes de la Federación Rusa vienen sin problemas directamente a la capital de Ucrania. Y ha sido así durante años. Sin Descanso. Serhiy lleva monitorizando la situación desde 2016. Y en esos cinco años, el suministro de carbón de la Federación Rusa no se ha detenido. La central eléctrica de Darnitsa compra carbón”, explicó el bloguero, que insiste en que la compra no es solo de carbón ruso sino también de los territorios ocupados, según evidencian datos a los que él se refiere. El año pasado, el SBU abrió una causa penal contra Anatoly Shkribliak, dueño de la empresa, por financiar el terrorismo [aunque ningún tribunal ucraniano ha calificado a la RPD/RPL como organizaciones terroristas].

“Así que el carbón que está aparcado en los vagones del distrito Darnitsky puede no ser ruso sino robado de ORDLO. Los residentes de Kiev respiran las emisiones de la quema de este carbón, pagan por él contra su voluntad, financian la agresión contra Ucrania y nadie hace nada al respecto porque es más lucrativo para los dueños de la planta eléctrica y los oficiales que les cubren”, concluyó Kazansky. Una aproximación un tanto simplista. Los residentes de Kiev no solo, según dice él mismo, “respiran las emisiones de la quema del carbón ruso” sino que ese carbón calienta sus casas e impide que los residentes de la capital ucraniana se congelen en sus hogares.

Por cierto, la planta de Darnitska suministra calefacción y electricidad a las empresas industriales y áreas residenciales de los distritos de Dnipro y Darnitska de Kiev, que incluye también Rusanovka. La planta calienta a más o menos el 10% de las áreas residenciales de la capital de Ucrania y el bienestar de 300.000 residentes de la margen izquierda de Kiev depende de esta operación. Los verdaderos patriotas de Ucrania exigen que la planta pase a utilizar gas, que como habrán adivinado también es ruso, solo que se haga con gas de retorno [gas ruso que llega a Eslovaquia a través de Ucrania y que Ucrania adquiere a Eslovaquia, no a Gazprom, a un precio más alto-Ed] o están dispuestos incluso a usar leña. El carbón ruso, y más aún el producido en la RPD y la RPL, es repugnante para ellos por su origen.

Esta ideología que califico de “para que se entere la abuela, me voy a congelar las orejas”, es inherente a un cierto estrato de la sociedad ucraniana, que quiere vivir en la Ucrania europea olvidando que Europa depende de Rusia en términos de energía. Al mismo tiempo, los pastores que han prometido devolver a Ucrania al rebaño de la próspera Europa piensan de forma mucho más racional. Por ejemplo, el mismo Rinat Ajmetov se las ha arreglado para vender en Ucrania carbón producido en territorio ruso y de las Repúblicas Populares al precio marcado usando la fórmula “Roterdam+”. Dicen que esta simple trama ha mejorado significativamente las finanzas del oligarca.

A veces sueño que los verdaderos “hijos de Ucrania” tomarán las calles y bloquearán todo lo que llegue de Rusia a Ucrania. Así se quedará sin carbón la planta eléctrica de Darnitska y también 300.000 ciudadanos de Kiev, congelados en sus casas. Y lo más importante de esa terapia de choque sería que no haría sido organizada por Rusia, que tiene la capacidad de crear en cualquier momento un “apocalipsis energético” para Ucrania sino por los verdaderos patriotas, que durante años se han guiado únicamente por las buenas intenciones y han empujado al país al abismo.