Discriminación electoral como castigo

Artículo Original: Antifashist

A seis meses de la campaña electoral, la Comisión Electoral Central de Ucrania propone filtrar al electorado según sus sentimientos separatistas. Así, uno de los activistas de Maidan, Andrey Magera, a quien Yuschenko regaló un puesto en la CEC, ha tomado la iniciativa para privar de derecho al voto a los residentes de Donbass y Crimea.

Magera, vicepresidente de la Comisión Electoral Central, cree que quienes participaron en lo que califica como pseudo-referéndum en Crimea o en Donbass deben ser privados de la ciudadanía ucraniana y, por lo tanto, del derecho a participar en las elecciones que garantiza el documento del Tridente. La idea fue publicada en Facebook, acompañada por un vídeo en el que se pregunta a residentes de Lugansk si están dispuestos a entregar sus pasaportes ucranianos y cambiarlos por pasaportes rusos.

Más adelante borró la cuenta alegando una curiosa explicación: para no dar publicidad a los “medios pro-Putin” que habían realizado la encuesta. Sin embargo, el oficial no retiró sus palabras. Según explicó, si Ucrania adoptara una nueva Constiución, debería introducir la idea de retirar al ciudadanía ucraniana a aquellos que voluntariamente hayan recibido un pasaporte ruso, a quienes hayan participado en los “gobiernos ocupantes” y quienes participaran activamente en el referéndum de la RPD y la RPL.

“Teniendo en cuenta los bajísimos índices de popularidad de Poroshenko, se está buscando cualquier forma para limitar las protestas del electorado. Así que se empieza a hablar de manipular pasaportes, una caza de brujas. Porque sabemos con qué facilidad la servil prensa controlada por el poder califica de disidente a cualquiera y son capaces de crear una “comisión de lustración” para decidir a quién permiten votar y a quién no. Una flagrante violación de los derechos civiles y electorales en la Constitución pero, ¿quién presta atención a la Constitución? Al fin y al cabo, Poroshenko ya ha anunciado cambios en la Carta Magna. Así que busca eliminar a disidentes que podrían apoyar al actual poder, especialmente al campo de la oposición”, opina el analista Yakubov.