Pérdidas y suministro extranjero

Artículo Original: Tetyana Montyan

Amigos, constantemente me preguntáis en las redes qué pienso de las declaraciones de Jodakovsky o Girkin [Strelkov]; cómo se está desarrollando la situación en los frentes, si todo está tan mal o si todo es una exageración; cómo afectará el suministro de armas occidentales el curso de las hostilidades y cuándo el frente llegará a la frontera occidental. No soy una experta militar ni tengo entrenamiento en ninguna de las artes castrenses, estoy bastante lejos de eso. Pero, como investigadora y abogada, soy capaz de trabajar con los datos y evaluarlos. Es en este contexto, usando los datos disponibles públicamente de fuentes reconocidas, en el que doy mi opinión.

A febrero de 2022, el número de efectivos en las Fuerzas Armadas de Ucrania ascendía a 250.000 personas frente a las 150.000 del ejército ruso [en Ucrania] y las 40.000 de la RPD/RPL. A finales de mayo, Zelensky afirmó que el número de efectivos de las Fuerzas Armadas de Ucrania ya es de 700.000. Como sabemos, Rusia no ha aumentado el tamaño de su ejército y no ha realizado siquiera una movilización parcial.

Sigamos. También en febrero de 2022, el Ejército Ucraniano tenía 800 tanques a su disposición, más de 1200 se encontraban en los depósitos, había más de 1000 piezas de artillería autopropulsada y 2000 cañones, más de la mitad en los depósitos. Había más de 2500 vehículos de infantería, blindados, etc. y más de 10.000 vehículos militares de diferentes propósitos. Ucrania tenía más de 100 aeronaves y un número similar de helicópteros. También tenía alrededor de 500 unidades de diferentes sistemas de lanzacohetes múltiples. Como vemos, las Fuerzas Armadas de Ucrania son, en términos de personal y armamento, más fuertes que ningún ejército al que se haya enfrentado Estados Unidos. Al mismo tiempo, el Ejército Ruso no está luchando solo contra el Ejército Ucraniano, sino contra el Pentágono y la OTAN, que suministra asistencia completa a sus subordinados en la planificación de operaciones, inteligencia y realización de operaciones especiales.

¿Dónde estamos a día de hoy? Zelensky grita al mundo entero que el Ejército Ucraniano no tiene nada con lo que luchar y exige unos suministros inmediatos y masivos de armas. ¿Qué ha pasado? ¿Dónde ha ido nuestro propio equipamiento que se encontraba en los depósitos? ¿Ha sido destruido? El mundo entero ha enviado ayuda. Polonia, Chequia y Eslovaquia han enviado todos los tanques que tenían a las Fuerzas Armadas de Ucrania, algo más de cien en total. Decidme, ¿pueden jugar algún papel entre los 2000 que tenía el Ejército Ucraniano? No. Lo mismo ocurre con los famosos howitzers estadounidenses, alemanes y franceses. Todos fueron reunidos y enviados a Ucrania, un par de centenares de piezas de la OTAN, cuando el Ejército Ucraniano disponía de 3000 unidades al inicio de la guerra. ¿Cómo puede ayudar ese par de cientos de piezas de artillería de la OTAN?

Prefiero mantener el silencio sobre los sistemas de lanzacohetes múltiples. Son peligrosos solo cuando se dispone de los misiles más modernos, con un rango de 300-500 kilómetros y podrían atacar la retaguardia en Rusia. Pero Estados Unidos no va a entregar tales misiles y, si lo hiciera, el régimen de Kiev lo usaría contra el Palacio de las Facetas [en el museo del Kremlin], lo que haría que todos los políticos y burócratas rusos entraran en razón, pero no afectaría de ninguna forma al resultado de la guerra.

Conociendo de mis amigos el sentir en el Ejército Ucraniano, puedo decir que las estadísticas del régimen de Kiev son el resultado de la falta de deseo de luchar entre gran parte de los soldados movilizados. Por algún motivo, no han comprendido la idea de que tienen que luchar por Zelensky y los valores occidentales. Y claro, el grupo de los nazis más motivados, que sí ejerce una feroz resistencia, es limitado y se está acabando.

En general, basada en estos datos, mi conclusión es la siguientes. Aunque Rusia está luchando con una mano atada a la espalda, negándose a utilizar toda la fuerza, el régimen de Kiev y toda su OTAN no van a ganar de ninguna manera. La cantidad de equipamiento que ya han perdido las Fuerzas Armadas de Ucrania es de tal magnitud que es absolutamente imposible de recuperar con los limitados suministros que están de camino. Si, de repente, el suministro aumenta, los países de la OTAN se quedarán sin tanques, artillería y vehículos blindados. Y eso, por supuesto, no va a ocurrir. Así que, aunque me gustaría que todo fuera más rápido y más organizado, no veo motivo alguno para pensar que “todo está perdido”.