Mientras Ucrania evita investigar lo ocurrido en la Casa de los Sindicatos el 2 de mayo de 2014, donde 42 personas perdieron la vida en un incendio provocado por fuerzas de extrema derecha, prosigue el juicio contra los acusados por los enfrentamientos que costaron la vida a seis personas la mañana de ese día. El tiempo ha demostrado que la fiscalía no dispone de pruebas suficientes para condenar a los acusados, todos ellos de grupos anti-Maidan –pro-rusos, como Ucrania prefiere calificarlos- muchos de ellos supervivientes de la Casa de los Sindicatos.
En diciembre, cuando los jueces habían decretado ya la puesta en libertad bajo fianza de varios de los acusados, activistas de Euromaidan, miembros del Praviy Sektor y otros grupos violentos tomaron el tribunal y amenazaron a los jueces hasta que estos revocaron la decisión. Tal y como exigían los activistas vestidos de camuflaje, los acusados no solo no fueron puestos en libertad sino que recibieron nuevos cargos, incluido el de separatismo.
Desde entonces, el juicio, basado en dudosas pruebas y acusaciones poco consistentes, no ha conseguido avanzar en absoluto. A principios de esta semana, el diario local de Odessa Timer informaba del fuerte contratiempo que había sufrido la acusación: un testigo clave, que había identificado a varios de los acusados en el lugar de los hechos, se negaba a testificar. La fiscalía perdía así una de las escasas pruebas de las que disponía. Sin pruebas reales para proseguir la acusación, la fiscalía recurre ahora a retrasar el proceso, algo que ha sido la norma desde el primer momento de la detención de los acusados.
Cambios, aplazamientos y ausencia de pruebas
Crónica Original: Timer-Odessa
En la sesión de hoy, el nuevo fiscal solicitó un aplazamiento hasta una nueva fecha alegando no haber dispuesto del tiempo suficiente para familiarizarse con los materiales del caso. Esto causó un gran enfado entre los acusados.
Como apuntó Kiril Shevchuk, abogado de uno de los acusados, el reemplazo del grupo de fiscales tuvo lugar el 8 de febrero y hoy es 4 de marzo. Así que el fiscal ha tenido tiempo más que suficiente para conocer los pormenores del caso y prepararlo.
“Esta flagrante manipulación por parte de la Fiscalía debe entenderse únicamente como un intento deliberado de retrasar el proceso”, afirmó Shevchuk.
Otros acusados compartieron también ese punto de vista. En su opinión, el repentino remplazo del fiscal responde al hecho de que el tribunal haya dado a la fiscalía una última oportunidad para aportar pruebas reales contra uno de los acusados: Evgeny Mefedov. Concretamente, se exige el informe de su detención, registro, los objetos requisados, así como los resultados del examen de dichos objetos requisados.
“Hay cuarenta o más personas en el equipo de la fiscalía. ¿Y resulta que ahora, cada vez que les solicitan documentos que no han sido entregados, van a reemplazar a su personal? ¿En cada ocasión se nombrará a un nuevo fiscal, que se presentará desinformado y sin estar preparado para hacer su trabajo?”, protestó Mefedov.
Según otro de los acusados, Doljenkov, la conducta de la fiscalía es una falta de respeto a los acusados y al tribunal. “En todo este proceso nunca hemos llegado a saber dónde están los materiales de la investigación previa al juicio. El fiscal Babin afirmó que se encontraban bajo su custodia, aunque también se planteó la posibilidad de que se encontraran en la oficina de la Fiscalía Regional en la calle Pushkin. Gracias al anterior fiscal nos enteramos de que parte de esos materiales se encuentran en la oficina del Fiscal General y otra parte en el departamento de investigación del SBU… Así que, ¿dónde están si es que existen realmente?”, afirmó.
El fiscal Dorosheko apuntó que no había participado en este asunto. Así que el juez Koria insistió en que el tribunal debía otorgársele el tiempo suficiente para revisar el caso, ya que no había estado involucrado en él previamente. Finalmente, los jueces fueron incapaces de tomar una decisión en la sala y tuvieron que retirarse a la sala de deliberación, donde tomarán una decisión.
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