Doble objetivo

Preocupado por el futuro del tránsito de gas ruso -el gas más sucio del mundo según Volodymyr Zelensky- a través de Ucrania, Kiev continúa tratando de precipitar los acontecimientos en busca de un doble objetivo: reducir las pérdidas derivadas de la inminente entrada en funcionamiento del gasoducto Nord Stream-2 y aprovecharse del alto precio actual para firmar un contrato de larga duración más favorable que el actual con el que compensar unas futuras pérdidas que ya se dan por hecho.

En ese sentido hay que entender las palabras de estos días de varios representantes ucranianos, que buscan renovar ya un contrato de tránsito de gas que finaliza dentro de tres años y que se firmó tras el acuerdo entre Rusia y Ucrania alcanzado con la mediación de Francia y Alemania en la cumbre del Formato Normandía celebrada en París en diciembre de 2019. En aquella cumbre, teóricamente acordada para hacer avanzar el proceso de paz en Donbass, aún hoy completamente estancado, el acuerdo sobre el gas fue el único logro alcanzado.

Así lo reflejaba Antifashist:

Kiev pretende exigir a Moscú la firma inmediata de un nuevo contrato de tránsito de gas a través de su territorio. El actual contrato expira en 2024 y después debería firmarse un nuevo contrato, pero Ucrania no cree a usía y trata de precipitar los acontecimientos.

El director general del Operador GTS, Serhiy Makogon, espera que el nuevo contrato de tránsito de gas ruso a través del territorio ucraniano antes de 2024, cuando expira el contrato en vigor. Lo anunció durante una mesa redonda del Atlantic Council.

“Insistimos en que se debe firmar un contrato de tránsito inmediatamente, sin esperar a finales de 2024”, afirmó según cita Ukrinform.

Makogon espera que ese movimiento garantizará que el tránsito de gas a través de Ucrania continuará a partir de 2024. Al exigir la firma inmediata de un nuevo contrato, Makogon no se olvidó de burlarse de Rusia y de declarar su esperanza de que el proceso de certificación del gasoducto Nord Stream-2 lleve mucho tiempo.

“Ahora la cuestión es la certificación. Esta es nuestra exigencia y monitorizaremos de cerca la certificación para que pase según las exigencias del Tercer Paquete de Energía sin excepciones”, afirmó añadiendo que espera que el proceso de certificación lleve “un periodo significativo de tiempo”.

-Antifashist

Como evidencian las palabras de Makogo, Ucrania busca ahora, en un momento mucho más complicado para Ucrania y en el que Rusia, finalizada ya la construcción del Nord Stream-2, se encuentra en una posición de mayor fuerza, renovar ese contrato para garantizar el suministro a través de Ucrania y hacerlo a precios más favorables. La coyuntura y la evidente debilidad de Ucrania en esta cuestión hacen necesaria para Kiev la ayuda de sus socios extranjeros, especialmente de sus socios estadounidenses, por lo que es también representativo que estas palabras se pronunciaran en un foro del Atlantic Council.