Entrada actual
Donbass, Donetsk, DPR, Ejército Ucraniano, LPR, Rusia, Ucrania

Bajmut-Artyomovsk

Territorio inhóspito y escasamente poblado, con una sociedad formada por campesinos ucranianos y personas y grupos de todo tipo de orígenes étnicos y culturales, muchos de los cuales habían llegado a la zona huyendo de diferentes tipos de represión o habían sido obligados a asentarse allí por la prohibición de asentamiento en otras regiones del Imperio Rusia, como es el caso de la población judía, el destino de Donbass cambió a finales del siglo XIX. Una región agrícola y de tan baja densidad de población que ni siquiera los comparativamente elevados salarios de la industria estimulaban a la escasa población local a convertirse en proletariado urbano, la introducción de la industria como proyecto impulsado por el Estado supuso el inicio del Donbass tal y como se ha conocido hasta ahora, con las minas y la metalurgia como sus principales activos. Sin embargo, el descubrimiento de recursos naturales como el carbón y los primeros intentos de desarrollar ciertas industrias puntuales se habían dado ya décadas atrás. Mientras la ciudad de Donetsk contaba en el año 1870 con una población de 164 habitantes, lugares como Lugansk, hoy más pobre y menos desarrollado que la capital de Donbass, habían intentado y fracasado anteriormente en la consolidación de cierto desarrollo industrial. Uno de esos lugares donde existía ya cierta actividad de extracción minera mucho antes de que el galés John Hughes sentara las bases de sus minas y su fábrica Novorossiya, origen de Yuzovka, hoy Donetsk, era Bajmut, donde ya en el siglo XVIII había comenzado el trabajo en las minas de sal.

Hace unas semanas, la prensa rusa destacaba el papel del militar Semyon Chirkov y el noble Nikita Vepreisky como pioneros en un desarrollo protoindustrial. El trabajo de extracción minera implicaba la necesidad de combustible y ante la dificultad de obtener madera, que había de ser transportada desde distancias lejanas, el capitán del ejército y el noble se aprovecharon del decreto de Pedro el Grande que permitía la búsqueda de minerales para iniciar el proceso de detección del elemento que marcaría el futuro de la región: el carbón, cuya existencia motivaría a partir de 1860 la rápida industrialización y urbanización de Donbass. Sin embargo, y pese al intento de la prensa rusa de destacar un vínculo histórico con esta ciudad por la que se lucha a muerte hoy en día, no fue hasta más de un siglo después cuando, tras la derrota en la guerra de Crimea, el Imperio Ruso constató la inevitabilidad del desarrollo industrial con el que compensar el atraso con respecto a las potencias europeas. La carencia de infraestructuras ferroviarias modernas hacía del Imperio Ruso una potencia atrasada que debía industrializarse, aunque fuera a costa del riesgo que suponía para el Estado la creación de zonas industriales y, con ellas, un proletariado urbano. Fue el inicio de un cambio que supuso un punto de inflexión para todo Donbass, zona elegida para impulsar la producción minera e industrial que consiguiera recuperar el retraso en las comunicaciones.

En ese contexto, Bajmut fue perdiendo peso a medida que otras ciudades, fundamentalmente Donetsk, crecieron y construyeron una industria que rápidamente hizo de Donbass una región de extrema importancia para el Imperio Ruso primero y para la Unión Soviética después. Antes de convertirse en Arytomovsk, la importancia de Bajmut recaía ya en las infraestructuras ferroviarias. Como parte de la línea Ekaterinin, que unía a Donbass con Ekaterinoslav, posteriormente Dnipropetrovsk y ahora Dnipro, Bajmut jugó un papel importante en la revolución de 1905 antes de que esta fuera derrotada. Y aunque la extracción de sal que comenzara su desarrollo preindustrial ha continuado hasta la actualidad -las minas de sal de la vecina Soledar han sido uno de los puntos en los que se ha luchado en las últimas semanas-, la importancia de la ciudad ha estado, en las últimas décadas, vinculada a su estatus de nudo de comunicaciones importante en esta región industrial, urbana y densamente poblada que acumulaba una parte importante de la producción de la Ucrania soviética y posteriormente de la Ucrania independiente.

A lo largo de estos años de guerra, Artyomovsk ha cobrado protagonismo en diversos momentos. En 2014, la población actuó de forma similar a otras ciudades de la zona y se formaron grupos de autodefensas. En esas primeras semanas, el arsenal de armas de la ciudad, capturado por el grupo de Strelkov, fue una de las fuentes de armas de las milicias en los primeros momentos de lo que sería la guerra. Artyomovsk participó en el referéndum del 11 de mayo de ese año, aunque volvió a control ucraniano poco después. La caída de Slavyansk y Kramatorsk en julio de ese año supuso un efecto dominó que dejó en manos de Ucrania toda una serie de ciudades que, como Artyomovsk, ya no podían ser defendidas. Al igual que lugares como Popasnaya, el hecho de encontrarse a escasos kilómetros del frente y contar con infraestructuras de comunicación hizo de Artyomovsk un fortín importante para Kiev especialmente tras la derrota en Debaltsevo. Fue en Artyomovsk donde Poroshenko anunció que la huida, en muchos casos a pie y a través de los campos, de Debaltsevo a Aryomovsk, había sido en realidad “una retirada ordenada y planificada”. Desde entonces, ya como ciudad del frente, Ucrania convirtió a Arytomovsk en Bajmut y a Bajmut en una fortaleza militar. Planificara o no una operación Krajina para acabar militarmente con la RPD y la RPL, Ucrania invirtió el tiempo ganado en el proceso de Minsk en construir las fortificaciones contra las que ahora luchan las diferentes fuerzas rusas.

Aunque la batalla comenzó el pasado julio con un asalto que no prosperó tras un avance ruso a partir de la caída de Popasnaya, es en las últimas semanas cuando la ciudad ha ganado notoriedad y ha comenzado a ser utilizada como argumento para el discurso político y militar. Ucrania, que tardó doce días en admitir la pérdida de Soledar, más pequeña y menos importante, ha reafirmado estos días que “nadie va a entregar Bajmut, lucharemos con todo lo que tenemos”. Ese afán de lucha contrasta tanto con el discurso que mantiene que la ciudad carece de importancia estratégica e incluso táctica y con la crítica al bando ruso por su obcecación con su captura. Durante meses Zelensky ha calificado de alocada la estrategia rusa en Artyomovsk. Tanto el Gobierno ucraniano como su prensa afín han descrito la actuación rusa como el constante envío de personal mal equipado y preparado como simple carne de cañón en una batalla en la que no podían prevalecer y de la que, incluso en caso de hacerlo, no obtendrían ganancia sustancial alguna. “Rusia no cuenta los muertos”, afirmó recientemente Zelensky en relación con la batalla por la ciudad, sin que ningún miembro de la prensa preguntara por la gravedad de las bajas ucranianas. En una entrevista concedida a un medio occidental, preguntado por las bajas que está suponiendo la batalla por Bajmut, el asesor de la Oficina del Presidente Mijailo Podoliak afirmó que “no puedo responder por los muertos. Podremos determinar esa cifra cuando acabe la guerra”.

Pese a la falta de importancia táctica o estratégica y al hecho de que gran parte de la población ha abandonado la ciudad, Ucrania ha continuado enviando reservas a una lucha que, por sus imágenes, ha sido comparada con las batallas de la Primera Guerra Mundial. Sin que haya recibido crítica alguna por ello, el presidente ucraniano ha actuado y continúa actuando exactamente como afirma que está haciendo Rusia, luchando sin importar la cantidad de bajas o la destrucción. Hace tiempo que, para Ucrania, Bajmut dejó de ser la batalla por una ciudad. La resistencia allí tiene un doble objetivo: justificar la exigencia de más armas a sus socios y mantener estático el frente para evitar que más tropas rusas queden liberadas para actuar en otras zonas del frente.

Zelensky pidió ayer misiles de largo alcance “para liberar Bajmut”. Ese argumento carece de lógica alguna: la lucha en el frente de Donetsk es cuerpo a cuerpo y las distancias entre las partes son escasas. Los misiles de largo alcance en esa zona no supondrían ninguna ventaja en el frente urbano de Donbass, pero sí en el campo abierto de Zaporozhie, para el que Ucrania desea esos misiles. Sin embargo, esa ofensiva que Kiev ya ha anunciado y con la que espera poner en peligro Crimea y obligar así a Rusia a una negociación según el dictado de Ucrania, precisa de tiempo. El ministro de Defensa de Alemania ya ha anunciado que la instrucción de soldados ucranianos en el uso y manejo de los preciados tanques Leopard tratará únicamente sus aspectos básicos. A riesgo de enviar al frente a soldados escasamente preparados, Occidente, como Ucrania, busca acortar los tiempos para limitar la capacidad de Rusia de prepararse para el ataque. Pero en este intervalo, Kiev debe impedir todo avance ruso.

El valor de Arytomovsk como nudo industrial o como trampolín para el avance hacia Slavyansk quedó limitado con la pérdida de Izium, pero el derribo de la primera línea de defensa de Ucrania supondría un avance decisivo en el objetivo de recuperar toda la región de Donetsk. Esa es la importancia de Artyomvosk para Rusia. Para Ucrania, Bajmut no es más que el lugar en el que espera tener ocupada a Rusia a la espera de más tanques, aviación y misiles con los que intentar avanzar en su frente prioritario, el sur. Mientras Rusia presiona sobre el terreno y busca recuperar los vínculos históricos con la zona, Kiev busca convertir a la ciudad, de construcción soviética y símbolo de todo lo que la Ucrania post-Maidan ha demostrado odiar, en una idea: “Bajmut no es solo un lugar, es nuestro hogar”, sentenció Podoliak. Bajmut es, al igual que la guerra, el símbolo de lo que Ucrania está dispuesta a hacer para conseguir sus objetivos.

Comentarios

Aún no hay comentarios.

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Reportes del frente archivados.

Registro

febrero 2023
L M X J V S D
 12345
6789101112
13141516171819
20212223242526
2728  
Follow SLAVYANGRAD.es on WordPress.com

Ingresa tu correo electrónico para seguir este Blog y recibir notificaciones de nuevas noticias.

Únete a otros 47K suscriptores

Estadísticas del Blog

  • 2.226.104 hits